Peligro

Mi cabeza había impactado contra la tierra húmeda, retumbando todo en mi interior.
Pensé que todo había terminado para mí, pero no sentía otro dolor, además del de mi cabeza... Los sonidos se habían apagado y mis ojos estaban desenfocados de cualquier cosa, como si de repente hubiera presionado el botón de Stop y de golpe todo volvió, tan rápido, como si recuperara el tiempo perdido, mis parpados se abrieron rápidamente, ruidos escandalosos se apoderaron del lugar y solo pude ver figuras borrosas moviéndose tan deprisa a mi lado, mis ojos estaban perdidos, oía gruñidos, corridas, golpes, la tierra, ramas y hojas revolviéndose entre los inquietantes movimientos de veloces fantasmas...
Un gruñido desgarrador me alerto, mis ojos viajaron enseguida hacia el autor de ese sonido y en el primer instante solo pude distinguir manchas, pero en cuestión de segundos distinguí la melena leonina de Jasper quien acorralaba al líder de los otros vampiros, el moreno, lo retenían por todos lados, Emmett, Alice y Carlisle lo encerraron, impidiendo un escape por la retaguardia o los laterales. Carlisle parecía dispuesto a remediar todo con palabras, aclamar a la razón, pero Jasper que lo tenia frente a frente no dio tiempo, se abalanzo brutalmente sobre el otro vampiro, aterrada abrí mis ojos por completos no podía dejar de ver, pero algo se puso delante de mi impidiéndolo, vi la maciza espalda de Edward al tiempo que se repetía el mismo gruñido desgarrador de antes, solo que con mas potencia, repitiéndose como un grito de dolor, agonizante, temblé mientras cerraba con fuerza mis ojos...
Mi cuerpo no sabia que hacer, al no recibir alguna indicación de mi mente que no reaccionaba.
-Bella, ¿Bella, te encuentras bien?-Pregunto una voz aterciopelada al borde de la histeria. Pose mis ojos hacia arriba y vi la mano de Edward extenderse, para que me reincorporara. Sus ojos estaban completamente oscuros, de un negro salvaje. Que jamás había visto en ellos. Su camiseta desgarrada y en su mirada presenciaba distintas emociones.
…Todo había terminado tan rápido como empezó o eso quise imaginar…
Tome su mano, pero al tratar de levantarme de la tierra aun mojada, sentí una leve punzada en mi tobillo. Volví a caer, solo que suavemente sobre la maleza. Edward me alzo entre sus brazos rápidamente, acurrucándome contra su helado pecho, volteando ligeramente y encontrándonos con unos gigantescos ojos verdes abiertos de par en par con sus pupilas contraídas que nos observaban sin parpadear.
-Ian...- solté casi sin aliento, sin saber si esas palabras había abandonado mis labios. Me había olvidado que aun estaba aquí, había dejado de pensar en el cuando ya no sentí su mano presionar la mía. Gire mis ojos hacia Edward, que no había apartado ni por un instante su vista del frente, aun tenia el ceño fruncido.
-¡Maldición! -Gruño para si mismo, casi imperceptible.
Pude notar que Ian abría su boca lentamente para hablar.
-Ustedes... ustedes son…- Sus palabras se detuvieron allí, quizás no encontraba un nombre adecuado para ponerle a los Cullen, o si lo había encontrado y no se animaba a decirlo.
Pero una cosa era clara, ahora él sabia que los Cullen… No eran una familia normal…
La respiración de Edward estaba demasiado agitada como para alguien que no necesitaba respirar y recién en ese instante me percate que las cosas por primera vez se salían de sus pétreas manos.
-Creo que lo sabe- Murmuro Jasper que derepente note que estaba cerca mío, junto con Alice y Rosalie. Los demás Cullen no estaban al igual que los otros vampiros, temblé de solo pensar que le habría pasado al vampiro que fue acorralado por Jasper.
- ¿Y como no lo va a saber? No disimulaste mucho que digamos Jazz- Le reprocho Alice a un tono de voz normal y mire a Ian para ver su reacción, pero todo lo que hacia era mirar hacia la nada, parecía bastante absorto en sus pensamientos.
-Pero yo solo quería protegerte Al- Respondió Jasper en un tono tan dulce que Alice, a pesar de aparentar enojo, sonrío.
-¿Te parece que necesito protección?- Pregunto retóricamente y sonrío de nuevo mostrando sus relucientes dientes.
-Vampiros- Escuche decir, ladee mi cabeza para ver a un petrificado Ian con sus labios abiertos mientras miraba la sonrisa de Alice, lo descubrió, esto no podía ser peor.
-Eres mas inteligente de lo que creí- Dijo uno potente voz con un tono de burla, note que Emmett había aparecido a un lado de Rosalie y la tomaba de la cintura mientras sonreía abiertamente, no parecía preocupado en absoluto.
Ian lo miro frunciendo levemente el ceño, sus pupilas estaban increíblemente contraídas y no parecía que hubiera parpadeado en ningún momento aun así era como si intentara disimular las expresiones de su rostro, no podría distinguir si estaba asustado o no, mas bien sorprendido, en ese instante sus ojos verdes se posaron en mi, inspeccionándome por completo, mirando como estaba sostenida firmemente entre los brazos de Edward, sin sorpresa o temor alguno, era claro que supo que yo ya sabia de esto.
-Muy bien hecho Edward- Dijo Rosalie despectivamente zafándose de los brazos de Emmett y dirigiéndose hacia nosotros- Deberías dedicarte a arruinar a nuestra familia, lo haces muy bien- Paso a un lado de nosotros y continuo caminado hacia quien sabe donde y Edward soltó un gruñido nada disimulado y cuando vi sus ojos note la desesperación grabada en ellos pero, ¿Por qué?
-Rose- La llamo Emmett y luego suspiro- Edward- Dijo y no pronuncio mas palabras, pero yo sabia que eso no era necesario.
-Tenemos que hacer algo, he leído su mente, no se detendrá- gruño Edward en respuesta, parecía que hubiera estado conteniendo las palabras desde hace un rato-No la pondré en peligro, no podemos seguir aquí-
- Entiende, tenemos que pensar bien lo que haremos- Explico Emmett.
-Tiene razón, ahora no solo tenemos que lidiar con eso- Dijo Alice, vi como dirigía una mirada disimulada hacia Ian quien seguía tan quieto como antes.
Edward gruño de frustración y su respiración se agito, era como si intentara componerse pero sin mucho éxito.
- Haremos lo que dijo Carlisle- Pronuncio Jasper en un tono apacible, pero su rostro se veía algo perturbado por alguna razón. De seguro en este instante podía sentir lo que Ian con mayor intensidad.
-¿Creen que eso servirá?- Gruño Edward- Es un cazador, nada lo detendrá, no podremos hacer nada si seguimos aquí, cada segundo que pasa la sigue exponiendo al peligro ¿Qué no lo entienden?- Estaba histérico, realmente lo estaba y yo en verdad me sentía algo perdida pero me había acostumbrado a ser la ultima en entenderlo cuando se trataba de hablar con los Cullen. Pero ¿De que diablos hablaban?
-Edward cálmate- Pidió Jasper.
-No me pidas que me calme Jasper- Gruño otra vez.
-Piénsalo, nosotros somos siete y ellos solo dos, mientras no nos distraigamos ni nos separemos de ellos, no les sucederá nada, al menos hasta que podamos pensar algo mejor- Razono Jasper y Edward no parecía tener con que rebatir.
Me sentía confundida, pero lograba conectar algunas cosas ¿Acaso ahora esos vampiros intentarían matarme? ¿A Ian y ami? Observe a Ian aterrada, no sabia que hacer y el estaba como si todo fuera un sueño y miraba asombrado y sin creer la situación que ahora estaba sumida en un silencio bastante incomodo en el que los Cullen intercambiaban miradas.
El silencio no duro demasiado pude observar como Edward lanzaba una mirada significativa y nerviosa a Emmet, que asintió con una gran sonrisa en su rostro. Emmet se aproximo hacia Ian rápidamente tomándolo por las piernas alzándolo a su hombro.
-¡Bájame! – Grito Ian que al parecer era capaz de reaccionar.
-Tenemos que irnos ya -Murmuro Edward en un tono bajo y sombrío mirando a todos sus hermanos mientras Ian soltaba insultos y se movía desesperadamente intentando zafarse de los fuertes brazos de Emmett que lo retenían sobre su hombro.
Edward me indico que cerrara los ojos aunque no me dio tiempo para nada mas, corrió tan rápidamente que tuve que aferrarme a su cuerpo lo mas fuerte que pude y sentí otra vez la vertiginosa sensación de viajar a la velocidad de la luz, pero no podía quejarme en un momento de tanta tensión como este. Llegamos al jeep en un tiempo inverosímil y Edward me deposito en el asiento del copiloto mientras el se colocaba al volante tan rápido como fue posible.
Ahora no podía cerrar mis ojos, se encontraban presas del pánico en ese momento. Emmet se deslizo en el asiento trasero del jeep y metió rápidamente a Ian en medio para luego sentarse a un lado de el y Alice abrió la puerta para sentarse del otro lado de Ian.
Edward gruñía por lo bajo pero demasiado rápido como para que pudiera entenderle, sujetaba el volante fuertemente, parecía poder romperlo en solo cuestión de unos segundos. Las puertas del jeep se cerraron casi automáticamente, al tiempo que Edward apretaba el acelerador a fondo. No sabía que hacer, a donde mirar; Ian parecía que iba a estallar en cualquier momento.
-¿A donde vamos?- Pregunto Ian, adelantándose ami completamente histérico.
Nadie contesto, ni siquiera le miraron. Estaba temiéndome lo peor...
-¡¡Maldita seas Cullen!! ¿A donde nos llevas?- Dijo removiéndose en el asiento como si intentara escapar pero las fuertes manos de Emmet lo retuvieron logrando que el se moviera mas intensa y desesperadamente.
-Tengo que sacarlos de aquí- Contesto Edward rápidamente sin quitar la vista del camino el estaba casi tan histérico como Ian o quizás mas- No lo entenderás, pero esos intentaran matarlos, conocen su olor, los rastrearan, tenemos que desaparecer ¡Ya!- Grito la ultima palabra y soltó un gruñido de frustración.
Vi como Alice y Emmett estaban completamente serios hundidos en sus pensamientos. Edward estaba tan pendiente de la carretera como si esperaba que algo saltara de las sombras de los árboles, ya el sol comenzaba a ocultarse, haciendo el camino más oscuro y tenebroso que antes, yo no estaba reaccionando no sabia que hacer hasta que algo hizo contacto en mi cabeza… Ellos seguirán nuestro olor… Olor… Nuestro olor se hallaba principalmente en nuestra casa, es decir, que irían a lo de Charlie. En ese momento, me percate de que no estábamos yendo a Forks.
-¡¡Para ya Edward, da media vuelta tienes que llevarnos a mi casa!! -Grite.
Pude notar como Edward aseguraba los cerrojos de las puertas. Esto no podía estar pasando.
-¡Déjame salir Edward!- Grite intentando abrir la puerta a un lado de mi como si fuera a tirarme por la carretera a la velocidad que íbamos- ¡No puedes hacer esto! ¡Charlie esta en peligro! ¡Tenemos que volver!- Chille descontrolada.
-Tranquilízate Bella, tengo que llevarlos a un lugar seguro primero- Dijo Edward aunque parecía no prestarme atención en absoluto- Charlie estará bien.
-¡¿A que te refieres Bella?!- Grito Ian en el asiento trasero y dejando de luchar perplejo por lo que yo había dicho.
-El nos busca, el nos busca a nosotros, nuestro olor esta concentrado en ¡esa casa! Y Charlie esta allí ¡¡Le hará daño!!-
-¡No puede ser! – Ian estaba perplejo- ¡Tienen que llevarnos a nuestra casa! ¡¡No pueden llevarnos contra nuestra voluntad!! Todo el mundo sabrá lo que son si no nos sueltan ya, todos se enteraran malditos bichos, tienen que dejarnos ir, realmente lo pagaran- Vocifero Ian una palabra tras otra.

-----------------------------------------------------------------

Bueno primero que todo perdon por tardar tanto en publicar y tambien por no dejar algo mas que esto ahora, pero despues de colgarnos tanto con Como sea! decidi que no se podia quedar sin un final... Asi que si o si esta historia va a seguir y en unos dias publico de nuevo :D ... Flora, si estas viendo esto ... Te mando saludos (? Y si alguien sigue leyendo Como sea! gracias por bancar (L) (:
Atte: Frutti ~

SIGA LEYENDO

CERRAR NOTA