Destino la Push

Sin poder pensar en completamente nada y nuevamente en estado zombie termine dentro de la clase de gimnasia, aunque ni note que mi cuerpo estaba en movimiento, para cuando me quise dar cuenta la clase había terminado, pensé por un momento que Mike no estaba en la clase, pero realmente si estaba allí no me percate de ello, era como si hubiera perdido el sentido, me encontraba en un duradero estado de shock.
-Tierra llamando a Bella, Bella, responde- me gire para ver a Ángela a mi lado, le sonreí a modo de disculpa.
- Lo siento, me desconecte-
-Si me di cuenta de ello- río - ¿Puedo preguntarte algo?- dijo precavida.
-Si, dispara- respondí rápidamente, pero ¿Desde cuando Ángela me decía si podía preguntarme algo? Oh, Oh. No lo sabía aun ¿Verdad? ¡No podía haberse enterado ya!
- Tu… bueno… sabes que no quiero entrometerme, solo… ¿has tenido problemas con Edward?- pregunto dubitativa… Claro, las noticias vuelvan… pero ¿Lo decía por lo de Cloe o por Mike?
Decidí al instante responderle con sinceridad, era Ángela, ella demostraba ser una buena amiga y confiaba en ella.
-Solo hubo unas confusiones últimamente- suspire- ¿De cual te enteraste?
-Creo que Mike esta de muy buen humor el día de hoy- comento como quien no quiere la cosa.
-Oh de eso- Repito, las noticias vuelan, nota mental, preguntarle a los Cullen como rayos hacen para guardar su secreto- Te diré la verdad, mi hermano Ian ¿Lo conociste?- asintió ¿Quién no lo conocía?- estuvo insistiendo que saliera con Mike, lo se, Ian es raro, pero no dejaba de molestarme con ello y creí que si me veía cerca de Mike iba a desistir, por que su instinto natural de hermano, lo detendría ¿Entiendes?- asintió nuevamente – Pero no quería llegar tan lejos y no conté con que Mike lo haría… Fue un grave error- solté un montón de aire de golpe.
-¿Y Edward?- susurro, sabia que Ángela se sentía incomoda cuestionándome, ella no era como Jessica quien me hundía en preguntas.
- No lo se, necesito hablar con el, espero que lo entienda- me sonrío dándome apoyo y dejamos de hablar.
Me despedí de Ángela decidida a buscar a Edward, porque quien sabe lo que estaría pensando en estos momentos, quizás pensaría que era mi venganza por lo de Cloe, que yo aun estaba enfadada con el, pero debería explicar las cosas, claro, mientras no le saque la cabeza a Mike, o al menos no del todo.
-Isabella- una mano apreso la mía y me arrastro hacia atrás, estuve apunto de caer, pero tiraron de mi para empezar a caminar hacia un pasillo- Vamos, te sacare a pasear- me dijo Ian, lo mire extrañada, ¿desde cuando era su mascota?
- No soy tu perro Ian- solté mi mano de la suya- ¿A dónde piensas ir?
- ¿No puedo hacerle una sorpresa a mi hermana de ves en cuando?- lo mire con mala cara, como si estuviera de humor para sorpresas, suspiro- A la Push ¿Vienes?
- ¿A la Push? – dije sorprendida, no esperaba eso en absoluto.
-Si, ¿No recuerdas? Donde vive Billy, el amigo de Charlie- asentí ya sabia que había allí- Bueno, Charlie pasara mas tarde por ahí, pensé que podríamos ir a visitar a Billy y a Jacob, el hijo ¿Te acuerdas?- asentí nuevamente, claro que me acordaba de Jacob, como olvidar que gracias a él descubrí el secreto de Edward- Hace tanto que no nos vemos, recuerdo que me pasaba mucho tiempo con el cuando éramos niños, en fin, se lo dije a Charlie y me dijo que te avise por si querías ir y comer allá, luego volvemos los tres juntos- me sonrío de forma compradora.
- ¿Qué gano si voy?- pregunte entrecerrando los ojos, note que estábamos llegando al estacionamiento.
-Seguir con vida- dijo en ¿forma de amenaza?- Vamos, ven un rato, diviértete y luego vuelves a tus problemas personales ¿Puedes hacerlo?- Pidió, lo pensé un momento, realmente necesitaba hablar con Edward, pero Ian tenia razón, necesitaba despejarme un rato y luego volvería a mis nubes, quiero decir, problemas.
Dejaría la ventana abierta cuando vuelva, quizás uno de mis problemas entre por ella antes de dormir.
-Iré- acepte- solo dame las llaves de mi monovolumen para irme cuando quiera y tu te puedes ir con Charlie – los ojos de Ian se abrieron demasiado y no me pareció buena señal.
-Oh, tu monovolumen, creo que eso no podrá ser- lo mire horrorizada ¿Qué diablos le había hecho a mi auto? Estaba apunto de matarlo- No me mires así, no tire a un barranco a tu preciosa chatarra- se defendió ante mi mirada asesina- solo lo lleve a casa.
-¿Cuándo?- dije sorprendida.
- Esa no es la cuestión, solo quiero que sepas que no iremos en tu auto-
-¿y como piensas llegar?-
-Nos llevaran- dijo sonriendo y se acerco a un auto que yo había visto antes- No te arrepentiste- le dijo a Zoe que estaba apoyada contra su BMW y ella dio vuelta los ojos.
-No, solo porque iré para allá- explico seria y me sonrío- Hola Bella, ¿Cómo estas?
-Bien, gracias- dije sorprendida- ¿y tu?-
-De maravilla, ¿así que conoces a Jacob?- pregunto sin perder la sonrisa, ¿Por qué actuaba así? La anterior vez no había sido tan sociable, a pesar de que no tuvimos mucho tiempo para hablar.
-Si, aunque no somos tan cercanos… Ian era el que tenia mas relación con el, yo estaba mas tiempo con sus hermanas- comente- ¿Tu lo conoces?
-Si, algo, por que conozco algunas personas en la reserva y he hablado algunas veces con el, pero me hablaba algo mas con las hermanas también- sonrío.
-Que pequeño es el mundo- comente sonriendo
- Sobretodo Forks- nos reímos de ello, porque era totalmente cierto.
-Claro, ahora hablas con mi hermana ¿Por qué la tratas tan bien? A mi no me tratas así- refunfuño Ian como un niño y Zoe le lanzo una mirada asesina- ¡Vamos! Perdón, por favor, por favor, por favor, por favor, por favor, por favor ¿Cuántas veces lo tengo que repetir?-
-Varias- río Zoe algo divertida, Ian sonrío viendo que conseguía algo.
-Por favor, anda di que me perdonas, por favor, perdóname, creo que moriré si no lo haces, vamos, por favor- la miro asiendo brillar sus ojos verdes como solo él sabia hacer, era un completo manipulador- ¿Te puedo confesar algo?-
-¿Qué?-
-Te quiero mucho, necesito que me perdones- dijo Ian dulcemente haciendo que yo me quede boquiabierta y no menos sorprendida que Zoe quien agarro el rostro de mi hermano y presiono sus labios contra los suyos, mire para otro lado y vi a alguien que por mala suerte vio lo que sucedía, Cloe, me aclare la garganta rápidamente y vi como Zoe se apartaba de Ian con un leve rubor en las mejillas, mientras mi hermano no dejaba de sonreír.
-No te ilusiones- dijo Zoe y levanto un dedo señalando a Ian- solo fue un impulso- suspiro.
Ian soltó una carcajada y Zoe se dio vuelta para subirse a su auto.
-Anda, suban- pidió con voz cansada, al parecer creía haber cometido un error por lo que hizo.
La obedecimos y nos montamos al auto, Ian en el asiento del copiloto y yo en el trasero.
Salimos del aparcamiento y mire donde, momentos antes, había visto a Cloe en estado de shock presenciando la escena, pero ella ya no estaba, sabia que se debería haber sentido fatal, pero por alguna razón, no podía sentir pena por ella, creo que aun seguía resentida por lo de la broma con Edward, tenia en claro que no era su culpa, pero al parecer inconcientemente no me había olvidado de ello.

Yo me consideraba una persona que disfrutaba los silencios, pero en este momento preferiría tener una banda de rock pesado a mi lado con tal de deshacerme de el incomodo silencio en el que nos habíamos sumido al instante en que nos subimos al auto.
Zoe e Ian no se dirigían la palabra, ambos concentrados en el paisaje a su alrededor como si nunca lo hubieran visto en su vida y fingiendo que no sentían la tensión en el ambiente como yo que me encontraba hundida en el asiento trasero sin poder concentrarme ni un segundo en el verde paisaje que nos rodeaba. Me estaba desesperando e intentaba recordarme a mi misma que era lo que hacia yo ahí… con una simple respuesta ¡Ni idea! ¿Cuándo se me ocurre pensar que Ian tiene algo de razón? Me tentó la idea de alejarme de mis problemas, pero ahora contaba con que mis problemas me perseguirían a pesar de que me mudara de planeta, aunque la verdad el más importante literalmente no podía seguirme a la Push, pero eso no significaría que mi propia mente no seguiría atormentándome con el.
No se cuanto duro la tortura, parecieron años a mi criterio cuando por fin empezamos a cruzar las primeras casas de la reserva.
Momentos después divisamos una pequeña casita rojo mate y de madera, que me resultaba vagamente familiar.
-¡Jake!- grito Ian y bajo del auto descapotable sin abrir la puerta para correr a abrazar a un chico de su misma altura, tez morena y largo pelo negro- ¿Cómo andas tanto tiempo viejo?
Me baje del auto con Zoe y nos acercamos un poco a los chicos que estaban hablando animadamente.
-Bella- me sonrío Jake al verme- Al fin decidiste pasarte por aquí y… ¿Zoe? ¿Se conocen?- pregunto sorprendido.
-Si, recuerda que voy al instituto de Forks Jake- contesto Zoe sonriendo algo incomoda.
-Si, claro que lo se, pero no imaginaba que ya te habías topado con los Swan-
-Sabes que nadie logra no toparse conmigo Jake - afirmo Ian con seriedad y di vuelta los ojos.
-Bueno, creo que tengo que irme- se apresuro a decir Zoe, al instante note que algo pasaba, ella estaba demasiado apresura por largarse de donde estábamos y Jacob tenia una mirada un tanto rara.
No entendía en absoluto lo que sucedía, pero era claro que “algo” sucedía, la mirada significativa de Jacob, el extraño comportamiento de Zoe y la expresión de confusión de Ian dejaban en evidencia que en esta escena algo se ocultaba, pero, sin lugar a duda, seria interesante descubrirlo…